Reflexionando en la palabra de Dios, en Efesios 5:1-8 llego a tres conclusiones:
1- Dios quiere que andemos en amor, como él nos amó.
2- Dios quiere que aborrezcamos conductas que no "conviene a los Santos".
3- Aún así debemos andar en amor, pero que no seamos partícipes con quienes practican tales cosas, dejando que "su ira actúe en los hijos de desobediencia", no la nuestra.
Conclusión:
Este es el andar de un hijo de luz, rescatado de las tinieblas.
Señor, ayúdame a amar, a buscar la santidad y cuidarla y a no participar con aquellos que No, y dejar que tu justicia obre en ellos y no la mía.