domingo, 25 de mayo de 2014

El Asiento Vacío

El Asiento Vacío

Luego le dijo Jonatán: Mañana es nueva luna, y tú serás echado de menos, porque tu asiento estará vacío (1 Samuel 20:18)

Todos tenemos un asiento que ocupamos. En el hogar, en el trabajo, en la iglesia.
Sabemos que a determinadas horas, ese asiento estará ocupado con tu persona.
Ya sea para comer, para descansar, para trabajar o para escuchar la Palabra de Dios, nuestra presencia en el asiento no pasa desapercibida.

Pero un asiento vacío podría decir muchas cosas.
En el hogar nos preguntaríamos:
¿Estará en el trabajo? ¿Habrá salido de compras?  ¿Estará de viaje? ¿Se habrá ido para siempre?
En el trabajo nos preguntaríamos:
¿Estará retrasado? ¿Estará enfermo? ¿Lo habrán cambiado de sección? ¿Lo habrán despedido?
En la iglesia nos preguntaríamos:
¿Estará enfermo? ¿Tendría dificultades para venir? ¿Estará enojado con el pastor o algún hermano?

Son preguntas especulativas que alguien podría hacerse al ver el asiento vacío, al que acostumbra  verte.
En el caso de David, su asiento estaba ocupado para apaciguar al rey Saúl con su música. Pero esta vez no quería presentarse, por que el rey lo quería matar. Saúl, al ver su asiento vacío, se daría cuenta que algo pasaba.
Un asiento vacío es señal de que algo pasa. Podría ser normal o anormal. Justificable o injustificable… pero algo pasa.

Cristo también un día dejo su asiento en el cielo, al lado del padre, para venir a este mundo. En este caso era por algo extraordinario que Cristo no yacía en su trono: abandonó su morada para redimirnos del pecado. Vino a morir por ti y por mí (Filipenses 5:5-8)
1-      Dejo su comodidad, su gloria, su exaltación, para venir y ser humillado, golpeado, sacrificado.
2-      Él ha ascendido al cielo, pero aun no descansa en su trono, ha ido a preparar lugar para nosotros (Juan 14:2-3)
3-      Pera habrá día en que lo veremos sentado en su trono, gobernando con poder (Apocalipsis 22:1-5)
4-      Preparémonos, porque nos vendrá a buscar (Apocalipsis 22:7,12)

En nuestra iglesia hay asientos para que comiences a prepararte para su venida. No lo malgaste con tu ausencia, no dejes que otro ocupe tu lugar.
Porque un asiento vacío en la iglesia habla con mucha elocuencia.
Al pastor podría estar diciendo: “tu sermón no vale”
Al miembro inconstante le dice: “ya vez, la iglesia está perdiendo terreno, cada vez es más débil”
Al nuevo que busca una iglesia le dice: “mejor veamos en otro lado”
Al tesorero de la iglesia le dice: “¡Cuidado! Habrá déficit”
Al miembro común le dice: “ustedes también pueden ausentarse el domingo próximo, todos tenemos el mismo derecho”
A los verdaderos fieles les dice: “trabajad, invitad, orad, llenad esos asientos vacíos”
A Cristo le dice: “Señor, mi boda, mi campo, mis animales, son más importantes que tu venida”

Un asiento vacío testifica contra los cultos; mata la inspiración, ahoga la esperanza; aleja el celo y es un peso que desanima a la iglesia.
Pero una silla con tu presencia dice “Ven Señor Jesús, ven”

Bendiciones

Pastor Marcelo Valdés
(Basado en la ilustración del "asiento vacío")

¿Cómo lograr principios bíblicos (convicciones) en nuestros hijos?


Antes de leer, vaya a la introducción

¿Cómo lograr principios Bíblicos (convicciones) en nuestros hijos?

1-      Haga una remodelación espiritual en su vida
a-      Considere lo que está demás y elimínelo. Limpie su corazón así como limpia su casa y acérquese a Dios (Santiago 4:8)
b-      Una cirugía que extirpe la gangrena debe ser de mutuo acuerdo entre el padre y la madre (En la ausencia de uno, mas fácil es estar de acuerdo ¿No?); (Isaías 1:16)… Nunca le consulte a sus hijos que está bien y que no, ¡Consúltele a Dios!

2-      Por muy doloroso que sea, arranque de usted lo que para Dios está mal (Mateo 18:7-9)

3-      Todo lo que haga no debe ser para presumir ser más espiritual ¡Sus hijos no le creerán! (Colosenses 3:23)

4-      Dele tiempo para que el cambio surta efecto, no es instantáneo.
a-      Porque los hijos le conocen y esperarán a que vuelva a los mismos males de siempre.
b-      Porque podrían estar mas grandes y por ende mas lejos de Dios y más difíciles de “contagiar” con su devoción y entrega.
c-      Pero si la cabeza cambia, el hogar cambia, tarde o temprano.

5-      Sea firme en poner parámetros bíblicos en SU CASA; no de espacios para “alternativas” contrarias a las Escrituras en SU CASA.
a-      Precisamente ese es el mal que estamos atacando, las “alternativas” que se volvieron costumbres en su hogar.
b-      Tal cual Josué, diga: “Yo y mi casa serviremos a Jehová”;.. Encárguese USTED de servirle y anime al resto.

6-      Enséñele a sus hijos que todo lo que Dios le ha dado es para beneficio también de ellos, tal cual en las Escrituras (Deuteronomio 6:10-12)
a-      Ellos no edificaron la casa, no la llenaron de todo bien (muebles, ropa, electro domésticos), no son los que dan agua o comida;.. ¡Lo que Dios da a los padres son para beneficio de los hijos!
b-      Padres “cuídate de no olvidarte de Jehová”;.. recuerda de donde te saco y donde te puso. Y si lo has olvidado, entonces no te sorprendas de tus hijos.



 Bendiciones
Pastor Marcelo Valdés


jueves, 22 de mayo de 2014

¿Por qué hay jóvenes “cristianos” que no guardan los principios Bíblicos?


Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes, reprobados en cuanto a toda buena obra” (Tito 1:16)



¿Por qué hay jóvenes “cristianos” que no guardan los principios Bíblicos?

Por culpa de nosotros, los padres. Porque de nosotros depende toda educación. Si bien la salvación es personal, la guía de todo padre es crucial.
La Palabra de Dios es clara: "Si Jehová no edificare la casa,
    En vano trabajan los que la edifican;.." (Salmos 127 a)
Muchos podrían culpar al mundo y su estado en declive; y es cierto que es decadente, no podía ser menos, pues el pecado avanza en el orbe. Pero el mundo no entra a la intimidad de la casa sin nuestro permiso. SOMOS LOS RESPONSABLES DE LO QUE INFLUENCIA EN EL HOGAR.
Nuestras pésimas dedicaciones a Cristo y su Palabra, a la oración y a su iglesia, y nuestra máxima preocupación por las banalidades humanas, han sido claras brújulas para nuestros hijos, quienes han decidido simplemente reproducir lo que hacemos,.. Y a veces mejor que nosotros.
Ellos nos imitan. Aprenden con mirarnos y quieren superarnos. En principio buscan aprobación, luego adaptación, para finalmente volar por sí mismos, aun mas lejos que nosotros. Pero todo parte por lo que mostramos… Mejor dicho, por lo que en realidad somos.
Si seguimos un equipo de futbol, ellos lo siguen y se hacen verdaderos jugadores. Si escuchamos determinada música, ellos la adoptan y aprenden a tocar instrumentos. Si nos gusta cierto tipo de comidas, ellos la consumen y nos alientan a cocinarla para un tiempo en familia. Aprenden de nuestra religiosidad, aprenden de nuestra educación. Porque aprenden de lo que somos, imitan lo que hacemos, siguen nuestras pisadas yendo mas lejos de lo que nosotros hemos llegado. Y ¿No es eso lo que queremos? ¿No es un sueño de todo padre que nos superen en todo?... Y cuando ven que nuestra fe es débil, cuando descubren que la iglesia y Cristo no es más que un placebo que calma la conciencia ¡Ellos nos superan! ¡Van mas allá de lo que somos!
Si nos ven alejados de la iglesia, ellos se alejan de Cristo. Si nos ven con rencores entre hermanos, ellos llegan al odio. Si nos ven faltas en algunos principios, ellos podrían violar todas las convicciones… Muchas veces les damos el puntapié inicial, y hasta los alentamos un poquito con nuestra inconsciencia, pero somos nosotros los culpables, en gran medida, de las licencias que ellos se toman.
Pero podríamos estar a tiempo de que también vean la real transformación que Cristo puede realizar en nosotros, y por ende, en ellos… ¿De quien depende?... Bueno, si amamos a nuestros hijos y queremos para ellos lo mejor de lo que nosotros hemos logrado, entonces desearemos la más firme convicción y fe en Cristo a la que puedan llegar por imitarnos, porque los hijos siempre van más lejos. Si nosotros amamos al Señor, ellos podrían llegar a adorarle.

Bendiciones.

Pastor Marcelo Valdés

Segunda parte: ¿Como lograr principios bíblicos (convicciones) en nuestros hijos?
http://ergonesna.blogspot.com/2014/05/como-lograr-principios-biblicos-reales.html